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La tasa de éxito de la FIV es uno de los muchos factores importantes que una mujer tiene en cuenta a la hora de elegir una clínica de reproducción para la inseminación artificial.

Una vez embarazadas y madres, las mujeres respiran aliviadas, creyendo que el problema de la infertilidad ya no las amenaza y podrán tener tantos hijos como quieran.

La gestación subrogada está prohibida en muchos países, incluida Francia. Sin embargo, ciertos países como Bélgica, Ucrania o Canadá permiten esta práctica bajo ciertas condiciones. Este artículo explora destinos legales para quienes buscan ampliar su familia mediante la subrogación.

La planificación del embarazo es un proceso complejo que debe tener en cuenta el estilo de vida actual y los cambios necesarios en el mismo para aumentar la probabilidad de concepción, un embarazo exitoso y el nacimiento de un niño sano.

El embarazo después de un aborto espontáneo es asociado a muchas experiencias emocionales y muchas preguntas.

A primera vista, puede parecer que la relación «estrés-infertilidad» es muy condicional, sin embargo, el primero es un concepto psicológico y el segundo tiene causas principalmente hormonales y fisiológicas.

A la hora de planificar la futura maternidad, las mujeres recurren a diversas estrategias.

En los medios de comunicación de la salud de los hombres, se habla sobre todo en el contexto del bienestar sexual, con sólo referencias ocasionales a la salud reproductiva. Sólo cuando los hombres comienzan a planificar la paternidad, algunos se enfrentan al problema de la infertilidad masculina. Una de las causas de la infertilidad masculina es la azoospermia, es decir, la ausencia de espermatozoides en el líquido seminal.

El deseo de tener un hijo puede surgir a cualquier edad. Y luego surge una pregunta lógica: ¿cuánto es esto posible? Las mujeres embarazadas mayores de 35 años se etiquetan como "madres ancianas en trabajo de parto". Aunque un embarazo exitoso después de los 35 es ahora la ocurrencia más común. Pero, ¿y si una mujer tiene más de 40 o 45 años? De hecho, para algunas personas después de cierta edad es más fácil concebir un hijo, para otras es más difícil.

No concebir puede ser psicológicamente doloroso para las parejas. Sin embargo, no es necesario sufrir solos, ya que muchos problemas se diagnostican y tratan fácilmente. En caso de intentos infructuosos durante el año por debajo de los 35 años, y dentro de los 6 meses, más de 35, así como con abortos espontáneos u otros síntomas perturbadores y factores de riesgo, debe buscar ayuda.